Bentham, la admisibilidad de las pruebas… y Scopus

Hace algunos meses tuve la alegría de ver publicado mi artículo titulado «Lectura histórico-dogmática de la visión de Bentham sobre la admisibilidad de la prueba en el proceso judicial», escrito con el querido y generoso Álvaro Pérez Ragone.

Les comparto el resumen del artículo:

Un estudio revisado y releído de Bentham sobre la admisibilidad de la prueba es importante histórica y actualmente. El autor señaló que el juez debe considerar si las pruebas que aún no se han entregado están disponibles para ser admitidas enel juicio dentro de un período de tiempo razonable. Si las pruebas son importantes para el caso, el juez debe esforzarse por ordenar y esperar su producción. Sentados sus presupuestos filosóficos e históricos principales, así como los puntos que más criticó en relación al common law, se identifica el rol del proceso judicial y del juez dentro de su pensamiento. Así, se analiza sistemáticamente su teoría de la prueba y el denominado sistema doméstico o natural del procedimiento, cuya principal idea gira en torno a la supresión de las reglas procedimentales excesivamente técnicas de la época a favor de un aumento de facultades discrecionales del juez. Para llegar a la decisión correcta, el tomador de decisiones debe contar con todas las pruebas relevantes sobre el asunto para descubrir la verdad.

Jeremy Bentham (1748-1832).

El artículo puede ser consultado aquí:

https://www.academia.edu/87641400/Bentham_y_la_admisibilidad_de_las_pruebas

Este texto tiene la particularidad de haber sido publicado en la Revista de Estudios Histórico-Jurídicos de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, y está indizada como Scopus Q1 en historia y Q2 en derecho. Pero, ¿qué quiere decir esto?

Sobre Scopus

Scopus es una base de datos que alberga a una gran cantidad de publicaciones (libros, revistas científicas y textos de conferencias académicas) que cumplen con diversos requisitos. Varios de ellos son muy exigentes: desde una revisión ciega de pares hasta el cumplimiento de normas éticas de parte de los/as autores. Sólo si es que las publicaciones cumplen con esos requisitos por un tiempo prolongado, Scopus, luego de una rigurosa revisión, las incorpora en su base de datos.

En la medida que estos requisitos se cumplan, la publicación (específicamente las revistas científicas) van subiendo en cuartiles: desde el cuarto, que es el inicial (Q4) hasta el primero (Q1). El cumplimiento también es crucial para mantenerse en el cuartil, dado que las revisiones de parte de Scopus son periódicas.

Por ello, publicar en una revista Scopus suele ser una empresa difícil, sobre todo en el caso del derecho: al margen de lo que demora la propia elaboración del texto, cuando se envía suele pasar por un examen inicial de parte del comité interno de la revista y luego se inicia el arbitraje o referato: se designan a dos especialistas en el tema que, sin saber la identidad del autor, revisan el texto y emiten un informe que puede ser aprobatorio, sugerir modificaciones o rechazarlo. Luego de correcciones de parte del autor (que tampoco conoce a los árbitros), se vuelve a revisar y, de ser aprobado, sólo después se convierte en un texto aceptado para publicación.

Pero no sólo ello: la publicación podría tardar más tiempo debido a la periodicidad de la revista y a la cantidad de textos que han sido previamente aprobados y están en la fila.

¿Por qué es importante que un/a profesor o académico publique en Scopus? Esto se debe al peso que organismos estatales que promueven la investigación y varias instituciones educativas públicas o privadas (aunque no todas, por cierto) han decidido otorgar a ciertas publicaciones. Hay, pues, una decisión política de que esas publicaciones responden a criterios de calidad y, por tanto, son merecedoras de mayor reconocimiento. ¿Por qué? Porque es un factor muy importante para los ránkings internacionales de investigación, tanto para un país como para la propia institución educativa.

Por ello es que publicar en Scopus tiene un peso mayor para muchos efectos: ascenso en la jerarquía docente, metas de producción, premios dinerarios, entre otros. No es diferente en el caso de los organismos estatales: hay diversas clasificaciones que dan mayores beneficios a los/as investigadores/as.

Por tanto, a mayor cuartil, mejor. Así, dado que las revistas Scopus con mayor cuartil suelen ser más procuradas, publicar en una Q1 o Q2 suele ser más difícil que una Q3 o Q4.

Entonces, si un/a académico/a trabaja en una universidad que tiene como política que la investigación de sus docentes (al menos los de planta) se encuentre fundamentalmente dirigida a las publicaciones Scopus, preparar este tipo de textos ya no responde únicamente al gusto por escribir, discutir ideas y publicar, sino que ya constituye un auténtico trabajo, que responde inclusive a obligaciones laborales.

No hay duda de que esto tiene diversos problemas de diversa índole; pero, sin perjuicio de ello, se trata de un camino que no todo abogado/a o profesor/a está dispuesto a seguir, sea debido al tiempo que toma preparar un texto riguroso que pase todos los filtros, al tiempo que puede demandar la propia revisión de pares (no pocos meses), a las propias exigencias que ésta podría colocar en cuanto a metodología o a las ideas de fondo, o, inclusive -y esto sí que es preocupante- a una actitud contraria a que otras personas puedan calificar el trabajo de uno.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: